Caminos dorados
En el desierto, los caminos posibles son infinitos. Allí donde mires encuentras arena y arena. Y llegas a la conclusión de que la arena será tu nuevo sendero, pero cada paso, en cada dirección, mostrará un camino. Así que estás obligado a pensar en el siguiente paso.
Thursday, November 12, 2009
La vida es como un combate de boxeo. Te preparas, te calzas las botas, te pones los guantes, te pones el albornoz de sueños, caminas hasta el ring, te subes y entonces... Entonces te quitas el albornoz, suena una campana y comienza la vida real, que no deja de lanzarte puñetazos por todos lados. Y allí te encuentras tú. La victoria sólo depende de tus habilidades, de tu inteligencia, de que consigas controlar la situación en algunos momentos (en los más), de que consigas esquivar todos esos golpes que la vida te lanza despiadadamente, de que vayas ganándole puntos poco a poco y que al final de cada round tengas más puntos que ella. La diferencia de puntos marca la felicidad que te llevas. Y la vida está claro que no es un combate a 12 rounds. Ojalá fuera así. Pero no, hay un round cada poco. Y el combate dura lo que tu corazón aguante las embestidas y sacudidas de tu contrincante. Y está claro que lo mejor sería tumbarle y conseguir dejarle K.O. Pero, amigo, eso es simplemente utópico. Concéntrate en ir sacándole punto tras punto. Y recuerda siempre que por muy fuerte que sea el golpe, jamás nada debe tumbarte.
Saturday, October 24, 2009
Almas ardiendo.
Veo ahora, mientras termino mi vaso de agua, sentado tranquilamente en este cómodo sillón, a la vez que observo la tremendamente imponente quietud de la calle, que sólo tuve un amor verdadero. Que sólo quise a una persona. Que sólo abrí mi corazón en una ocasión. Y esa persona ahora no está a mi lado, pero podría volver a estarlo. Y esto es lo único que me da fuerzas cada mañana para conseguir sacarme de la cama, para conseguir que camine en dirección incierta hacia ningún lado. Pero, a la vez, hacia algún lugar predestinado. Y quién sabe. Nadie lo sabe. Nadie puede saberlo, y eso es lo bonito de la vida. La incertidumbre constante. Sí, porque quizá algún día nuestros caminos vuelvan a converger.
No lucharé tontamente por nada, simplemente me dejaré llevar por la corriente y esperaré a que lo que tenga que llegar me sorprenda. Ya sea gratamente o tan sólo se tiña todo de un gris oscuro desmesuradamente triste.
Porque lo que un día se incendió, es complicado que deje de arder. Por mucha agua que se le eche encima, el fuego seguirá ardiendo aún una vez extinguido. Seguirá ardiendo en nuestra mente, en nuestro corazón, en las imágenes que guardamos en nuestras retinas del alma.
Porque sólo somos eso, almas vagando por el aire, mecidas por el viento, luchando por quemarse en el fuego eterno.
No lucharé tontamente por nada, simplemente me dejaré llevar por la corriente y esperaré a que lo que tenga que llegar me sorprenda. Ya sea gratamente o tan sólo se tiña todo de un gris oscuro desmesuradamente triste.
Porque lo que un día se incendió, es complicado que deje de arder. Por mucha agua que se le eche encima, el fuego seguirá ardiendo aún una vez extinguido. Seguirá ardiendo en nuestra mente, en nuestro corazón, en las imágenes que guardamos en nuestras retinas del alma.
Porque sólo somos eso, almas vagando por el aire, mecidas por el viento, luchando por quemarse en el fuego eterno.
Tuesday, September 29, 2009
La arena rendida de la incómoda montaña blanca.
Y cuando la tormenta venga a llevarme
Y me golpee con sus rayos encolerizados,
Sentiré el aliviante descenso de la lluvia
Recorriendo mis venas y arrancando mi vida.
Y cuando todo este inevitable final suceda
Sólo recordaré dos cosas de toda mi existencia.
Una será las mañanas calmadas de verano
Y otra las noches que compartí contigo.
Pero ahora, de momento, contemplo la luna
Subido a la angosta montaña blanca.
Y sólo suspiro por que el tiempo
Haga su camino a paso acelerado.
Y me golpee con sus rayos encolerizados,
Sentiré el aliviante descenso de la lluvia
Recorriendo mis venas y arrancando mi vida.
Y cuando todo este inevitable final suceda
Sólo recordaré dos cosas de toda mi existencia.
Una será las mañanas calmadas de verano
Y otra las noches que compartí contigo.
Pero ahora, de momento, contemplo la luna
Subido a la angosta montaña blanca.
Y sólo suspiro por que el tiempo
Haga su camino a paso acelerado.
Nuestra noche en la Calle de la Eternidad.
Algunas calles apagan sus luces,
Cierran sus ojos hasta la noche.
Se creen mareas durante el día
Sintiéndose amaneceres en el atardecer.
Y en ellas nosotros jugamos juntos,
Revoloteando y flotando en el aire,
Con los sueños recién despiertos,
Creyendo que jamás van a perecer.
No entiendo lo que queda por vivir
Y tampoco me preocupa demasiado.
Sólo sé que pararía ahora mi tiempo
Y viviría eternamente aquí contigo.
Cierran sus ojos hasta la noche.
Se creen mareas durante el día
Sintiéndose amaneceres en el atardecer.
Y en ellas nosotros jugamos juntos,
Revoloteando y flotando en el aire,
Con los sueños recién despiertos,
Creyendo que jamás van a perecer.
No entiendo lo que queda por vivir
Y tampoco me preocupa demasiado.
Sólo sé que pararía ahora mi tiempo
Y viviría eternamente aquí contigo.
Tuesday, September 15, 2009
El sentimiento acróstico y eterno.
Mueren las hojas sobre las praderas amarillentas
Antes de volar y perder sus colores para siempre.
Recuerdo cuando tus ojos verdes iluminaron la noche,
Incluso eclipsaron a la luna que miraba envidiosa
A la mujer más maravillosa que podría existir.
Todas las tardes que te dije “te quiero” y te besaba
Estarán grabadas en mi memoria para siempre.
Quien no quiso dejar de respirar aquella noche
Unicamente puede decir que siente lo ocurrido.
Imaginaría mi entierro bajo la lluvia pálida
En una procesión de miradas contenidas y tristes.
Recuerda que siempre te amaré, siempre será así,
Olvidar lo que eres para mí sería totalmente imposible.
Antes de volar y perder sus colores para siempre.
Recuerdo cuando tus ojos verdes iluminaron la noche,
Incluso eclipsaron a la luna que miraba envidiosa
A la mujer más maravillosa que podría existir.
Todas las tardes que te dije “te quiero” y te besaba
Estarán grabadas en mi memoria para siempre.
Quien no quiso dejar de respirar aquella noche
Unicamente puede decir que siente lo ocurrido.
Imaginaría mi entierro bajo la lluvia pálida
En una procesión de miradas contenidas y tristes.
Recuerda que siempre te amaré, siempre será así,
Olvidar lo que eres para mí sería totalmente imposible.
Tuesday, May 26, 2009
Alcanza tu sueño.
Míralo, siéntelo, sabes que puede ser tuyo.
Estira el brazo y trata de alcanzarlo.
Nunca abandones aquel maravilloso sueño,
Porque nada será tan gratificante.
Conoce las corrientes del río que te empuja
Y trata de superarlas hábilmente.
Siempre habrá una estrella a tu lado
Vigilando que todo salga bien.
Siempre tendrás alguien a tu lado
Que te haga sentirte a salvo.
Es el camino que tienes que seguir.
No hay otra forma de alcanzar tu vida.
Has de olvidar las otras posibilidades
Que te atormentan con sus decepciones.
Siente, cree, confía en tus capacidades
Y no olvides no dejar nunca de luchar.
Como el sol que agradece con sus rayos
La lucha de todo aquello que le sigue.
Una lágrima nunca sería más maravillosa
Que cuando se funde con una sonrisa en tu cara.
Y recuerda que siempre tendrás alguien a tu lado
Que te haga sentirte a salvo.
Siempre habrá una estrella brillando,
Vigilando que todo salga bien.
Te sientes tan bien que todo es mágico.
Te sientes tan bien que nada puede pararlo.
Te sientes tan bien que todo es tuyo.
Te sientes tan bien que…
…sí, la estrella brilla a tu lado.
Estira el brazo y trata de alcanzarlo.
Nunca abandones aquel maravilloso sueño,
Porque nada será tan gratificante.
Conoce las corrientes del río que te empuja
Y trata de superarlas hábilmente.
Siempre habrá una estrella a tu lado
Vigilando que todo salga bien.
Siempre tendrás alguien a tu lado
Que te haga sentirte a salvo.
Es el camino que tienes que seguir.
No hay otra forma de alcanzar tu vida.
Has de olvidar las otras posibilidades
Que te atormentan con sus decepciones.
Siente, cree, confía en tus capacidades
Y no olvides no dejar nunca de luchar.
Como el sol que agradece con sus rayos
La lucha de todo aquello que le sigue.
Una lágrima nunca sería más maravillosa
Que cuando se funde con una sonrisa en tu cara.
Y recuerda que siempre tendrás alguien a tu lado
Que te haga sentirte a salvo.
Siempre habrá una estrella brillando,
Vigilando que todo salga bien.
Te sientes tan bien que todo es mágico.
Te sientes tan bien que nada puede pararlo.
Te sientes tan bien que todo es tuyo.
Te sientes tan bien que…
…sí, la estrella brilla a tu lado.
Sunday, April 12, 2009
Tornado del valle.
El tornado rodeó nuevamente la montaña
y las rocas golpearon el valle fuertemente,
el sonido de la calma se había esfumado
entre todas las almas que aguardaban la respuesta.
Cayeron las estrellas en la noche olvidada,
los halcones volaron a ras de suelo.
Tenía tan poco que ganar que no importaba
ser el hombre más triste del lugar.
Quise crecer y hacerme grande y fuerte
y pisar cada camino y romperlo en pedazos.
Envidiaba aquel tornado y toda su furia
pero no soportaría perderme con el viento.
Y las caras de las personas que allí aguardaban
reflejaban temerosas su miedo a perder todo.
Yo pensaba, disfrutando, con una sonrisa en mi boca,
que no tenía nada que perder entonces.
Así que cuando el viento cesó y el sol salió
y la gente volvió aplaudiendo a sus casas,
yo quedé solo en el inmenso valle dorado
esperando que algo me guiara.
Y nada vino, y nada vendrá.
Pero por ahora espero ser alguien.
Camino cabizbajo, aún con la sonrisa,
mientras el viento mece mi cabello.
Y el sol ablanda mi camino.
y las rocas golpearon el valle fuertemente,
el sonido de la calma se había esfumado
entre todas las almas que aguardaban la respuesta.
Cayeron las estrellas en la noche olvidada,
los halcones volaron a ras de suelo.
Tenía tan poco que ganar que no importaba
ser el hombre más triste del lugar.
Quise crecer y hacerme grande y fuerte
y pisar cada camino y romperlo en pedazos.
Envidiaba aquel tornado y toda su furia
pero no soportaría perderme con el viento.
Y las caras de las personas que allí aguardaban
reflejaban temerosas su miedo a perder todo.
Yo pensaba, disfrutando, con una sonrisa en mi boca,
que no tenía nada que perder entonces.
Así que cuando el viento cesó y el sol salió
y la gente volvió aplaudiendo a sus casas,
yo quedé solo en el inmenso valle dorado
esperando que algo me guiara.
Y nada vino, y nada vendrá.
Pero por ahora espero ser alguien.
Camino cabizbajo, aún con la sonrisa,
mientras el viento mece mi cabello.
Y el sol ablanda mi camino.
Monday, March 30, 2009
La luna en mil pedazos.
Desde el primer amanecer que me crucé con tu presencia
Hube fantaseado tantas veces con besarte y abrazarte.
Me imaginaba cómo serías en la intimidad de una cena
Y me alegraba gratamente cuando te imaginaba perfecta.
Sentía una alegría desbordante cuando me cruzaba contigo
Y nuestras miradas compartían dos segundos eternos.
Recuerdo los cafés y las calles llenas de amigas y amigos
Pero mi mirada se perdía siguiendo tu camino.
Estaba convencido de que no había alma más maravillosa
Entre todas las que habitan este torpe y triste mundo.
Pero las cosas han dado un giro espantosamente inesperado ahora,
Espero olvidar pronto la noche en que la luna se volvió temblorosa.
Yo quise entregarte mi corazón pero preferiste rechazarlo.
Decías que no buscabas amor en mí sino sólo consuelo.
Y el mayor error de mi vida fue permitirlo y proporcionarlo.
Sí, definitivamente no eras tan maravillosa como tanto había soñado.
Los ríos ahora escalan las montañas y el amanecer se vuelve oscuro.
Y el mar se seca tanto que los peces desearían poder caminar.
El mundo que conocía ha cambiado, dejando de ser mi mundo.
Ahora, sólo queda el abatido sonido de mi corazón roto y sus latidos mudos.
Dime, si no eres tú, no lo podrá ser nadie jamás.
Estaba dispuesto a entregarte todo cuanto tenía.
Pero la luna, por fin, se hizo pedazos y todos vieron su último centellear
Y trataron de recoger sus trocitos pero no los pudieron encontrar.
Desde ahora sólo me acompañará el temido tronar de los tambores
Que guiarán mi alma errante bajo la negra soledad que has dejado.
Quizá nunca consiga despertar de esta pesadilla que rodea mi noche,
Quizá ya nunca consiga soñar.
Hube fantaseado tantas veces con besarte y abrazarte.
Me imaginaba cómo serías en la intimidad de una cena
Y me alegraba gratamente cuando te imaginaba perfecta.
Sentía una alegría desbordante cuando me cruzaba contigo
Y nuestras miradas compartían dos segundos eternos.
Recuerdo los cafés y las calles llenas de amigas y amigos
Pero mi mirada se perdía siguiendo tu camino.
Estaba convencido de que no había alma más maravillosa
Entre todas las que habitan este torpe y triste mundo.
Pero las cosas han dado un giro espantosamente inesperado ahora,
Espero olvidar pronto la noche en que la luna se volvió temblorosa.
Yo quise entregarte mi corazón pero preferiste rechazarlo.
Decías que no buscabas amor en mí sino sólo consuelo.
Y el mayor error de mi vida fue permitirlo y proporcionarlo.
Sí, definitivamente no eras tan maravillosa como tanto había soñado.
Los ríos ahora escalan las montañas y el amanecer se vuelve oscuro.
Y el mar se seca tanto que los peces desearían poder caminar.
El mundo que conocía ha cambiado, dejando de ser mi mundo.
Ahora, sólo queda el abatido sonido de mi corazón roto y sus latidos mudos.
Dime, si no eres tú, no lo podrá ser nadie jamás.
Estaba dispuesto a entregarte todo cuanto tenía.
Pero la luna, por fin, se hizo pedazos y todos vieron su último centellear
Y trataron de recoger sus trocitos pero no los pudieron encontrar.
Desde ahora sólo me acompañará el temido tronar de los tambores
Que guiarán mi alma errante bajo la negra soledad que has dejado.
Quizá nunca consiga despertar de esta pesadilla que rodea mi noche,
Quizá ya nunca consiga soñar.
Wednesday, March 25, 2009
El lugar donde los jóvenes van.
He olvidado el camino de la vieja casa,
Llévame al lugar donde los jóvenes van.
Tú que tienes los ojos de la noche
Y el alma de los que pecan a todas horas.
El corazón flexible del pobre bailarín
Corretea desnudo por el suelo,
Mientras un montón de ancianos
Saltan y corren tras él.
Llévame al lugar donde los jóvenes van,
Sólo quiero estar allí ahora.
No tengo más que unos céntimos para darte
Pero espero que no te pongas exigente.
Recuerdas que ayer eras tú la que me necesitaba
Y yo no hice nada al respecto,
Pero no me lo tengas en cuenta.
Hoy es hoy y ayer ya se fue.
En mitad de la noche nadie parece peligroso
Porque todos se esconden tras las sombras.
Los salvajes que vienen del norte
Pueden esquivar las flechas que les lanzas.
Ten un poco de paciencia ahora que eres joven,
Ten claro que un día la perderás
Y las cosas desde entonces
Se harán mucho más duras.
Ahora llévame al lugar donde los jóvenes van,
Necesito emborracharme y perder el control.
No necesito de tu compañía una vez lleguemos allí,
Así que no te pongas pesada ni exigente.
Tienes lo que te acabo de dar que no es poco,
Con eso y un poco de tu esencia elegante
No te resultará complicado
Conseguir un coche de vuelta.
Así que llévame ahora, necesito encontrar
El lugar donde los jóvenes van.
El lugar donde se mueren todos ellos
Mientras tratan de olvidar sus caras.
Necesito olvidar quien soy y todo cuanto fui.
Necesito olvidar mi rostro y borrar mi mente.
Dime donde está el lugar donde los jóvenes van.
Llévame al lugar donde los jóvenes van.
Tú que tienes los ojos de la noche
Y el alma de los que pecan a todas horas.
El corazón flexible del pobre bailarín
Corretea desnudo por el suelo,
Mientras un montón de ancianos
Saltan y corren tras él.
Llévame al lugar donde los jóvenes van,
Sólo quiero estar allí ahora.
No tengo más que unos céntimos para darte
Pero espero que no te pongas exigente.
Recuerdas que ayer eras tú la que me necesitaba
Y yo no hice nada al respecto,
Pero no me lo tengas en cuenta.
Hoy es hoy y ayer ya se fue.
En mitad de la noche nadie parece peligroso
Porque todos se esconden tras las sombras.
Los salvajes que vienen del norte
Pueden esquivar las flechas que les lanzas.
Ten un poco de paciencia ahora que eres joven,
Ten claro que un día la perderás
Y las cosas desde entonces
Se harán mucho más duras.
Ahora llévame al lugar donde los jóvenes van,
Necesito emborracharme y perder el control.
No necesito de tu compañía una vez lleguemos allí,
Así que no te pongas pesada ni exigente.
Tienes lo que te acabo de dar que no es poco,
Con eso y un poco de tu esencia elegante
No te resultará complicado
Conseguir un coche de vuelta.
Así que llévame ahora, necesito encontrar
El lugar donde los jóvenes van.
El lugar donde se mueren todos ellos
Mientras tratan de olvidar sus caras.
Necesito olvidar quien soy y todo cuanto fui.
Necesito olvidar mi rostro y borrar mi mente.
Dime donde está el lugar donde los jóvenes van.
Wednesday, March 11, 2009
Olvidarte será duro.
Deduje el color que tomarían las cosas
Cuando vi flotar la nota tristemente olvidada
Y supe que volvería a encontrarte algún día.
Seguramente no sepas quién soy,
Pero sería, si me lo permitieras,
Tu compañero para siempre.
El susurro del viento invade mi mente
Y ahoga mi corazón entre la nebulosa soledad.
Soñé con ser alguien importante para ti.
Si ves mi cara no me reconocerás,
Te he visto tantas veces desde la distancia
Que carezco de otra imagen que no sean tus ojos.
Quizá el destino destrone mi cuerpo
Y haga el camino insoportablemente cruel.
No lamentaré las huellas que deje el tiempo,
Pero quisiera ser el que te acompañara.
No sabes cuánto he soñado con ello.
Verte significa ser feliz, aunque sea por un segundo.
Mañana puede que no recuerde si hoy es o no
El día más triste de toda mi vida.
O quizá sea el más feliz, porque cada vez que cierro los ojos
Imagino que estamos juntos para siempre.
Tengo una maleta cerrada con llave
Esperando reposar en el fondo del océano.
Llegan las nubes prematuramente primaverales
Con aire renovado tintando de ambarina tristeza.
Y a lo lejos suena una vieja canción.
He decidido marcharme y enterrar el dolor
Y sé que no será fácil conseguirlo
Pero creo que el destino ha querido que deje de sufrir.
Cuando vi flotar la nota tristemente olvidada
Y supe que volvería a encontrarte algún día.
Seguramente no sepas quién soy,
Pero sería, si me lo permitieras,
Tu compañero para siempre.
El susurro del viento invade mi mente
Y ahoga mi corazón entre la nebulosa soledad.
Soñé con ser alguien importante para ti.
Si ves mi cara no me reconocerás,
Te he visto tantas veces desde la distancia
Que carezco de otra imagen que no sean tus ojos.
Quizá el destino destrone mi cuerpo
Y haga el camino insoportablemente cruel.
No lamentaré las huellas que deje el tiempo,
Pero quisiera ser el que te acompañara.
No sabes cuánto he soñado con ello.
Verte significa ser feliz, aunque sea por un segundo.
Mañana puede que no recuerde si hoy es o no
El día más triste de toda mi vida.
O quizá sea el más feliz, porque cada vez que cierro los ojos
Imagino que estamos juntos para siempre.
Tengo una maleta cerrada con llave
Esperando reposar en el fondo del océano.
Llegan las nubes prematuramente primaverales
Con aire renovado tintando de ambarina tristeza.
Y a lo lejos suena una vieja canción.
He decidido marcharme y enterrar el dolor
Y sé que no será fácil conseguirlo
Pero creo que el destino ha querido que deje de sufrir.
Thursday, February 12, 2009
Edad y amor.
Hubo un día en el que era yo quien la acompañaba.
Le contaba mi vida y me preguntaba por el futuro.
Cambiaron mucho las cosas desde que éramos jóvenes.
No hay más que verlo para entenderlo.
No hay más que verlo para entenderlo.
Miro hacia atrás y me sorprendo sonriendo.
Y las sombras cubren mi cara para apagar el dolor.
Las cosas que solían ocurrir así porque sí
Ahora arden en el tiempo.
Ahora arden en el tiempo.
Di algo que pueda hacerme despertar y volver aquí.
Porque si no estaré eternamente en aquel lugar,
Recorriendo dulcemente las calles que nos vieron crecer,
Sonriendo a su lado.
Sonriendo a su lado.
Hay algo que cae y hay algo que deja de rodar.
Dime que no puedes entenderlo porque yo sí.
Dices que hay muchas más cosas que me merezco
Pero la quiero a ella.
Pero la quiero a ella.
Puede que esta noche las estrellas no acudan al baile.
Pero de todas formas me sentiré joven mientras recuerde
Que mis sueños sólo arderán un instante antes de morir.
Así que déjame soñar.
Así que déjame soñar.
Le contaba mi vida y me preguntaba por el futuro.
Cambiaron mucho las cosas desde que éramos jóvenes.
No hay más que verlo para entenderlo.
No hay más que verlo para entenderlo.
Miro hacia atrás y me sorprendo sonriendo.
Y las sombras cubren mi cara para apagar el dolor.
Las cosas que solían ocurrir así porque sí
Ahora arden en el tiempo.
Ahora arden en el tiempo.
Di algo que pueda hacerme despertar y volver aquí.
Porque si no estaré eternamente en aquel lugar,
Recorriendo dulcemente las calles que nos vieron crecer,
Sonriendo a su lado.
Sonriendo a su lado.
Hay algo que cae y hay algo que deja de rodar.
Dime que no puedes entenderlo porque yo sí.
Dices que hay muchas más cosas que me merezco
Pero la quiero a ella.
Pero la quiero a ella.
Puede que esta noche las estrellas no acudan al baile.
Pero de todas formas me sentiré joven mientras recuerde
Que mis sueños sólo arderán un instante antes de morir.
Así que déjame soñar.
Así que déjame soñar.
Tuesday, January 27, 2009
El primer paso.
Con la línea de lo que venga justo delante.
Como la línea continua de la autopista del desierto.
Y tus pies aún uno junto al otro, ¿y el primer paso?
Las estrellas brillan como diamantes deportados.
No hay razón para olvidar, dices, es fuego encendido.
Tu pueblo cerrado no te recordará.
Y una lágrima cae de tu mejilla junto a tus pies.
¿El primer paso?
El coche amartillado
Y la carta cerrada.
El reflejo de la luna
Sobre la casa olvidada.
El corazón del médico.
La lluvia sobre tu cara.
Si no lo miras, no lo ves.
Amanecer en verano.
La llama del genio.
Girasoles tostados.
Dime que no lo ves.
Mamá te dijo que no debes correr sino caminar.
La escuchaste bien y luego ella dejó este mundo.
Y tus pies uno junto al otro, ¿y el primer paso?
Luego te engañaron y volviste a caer en el abismo.
Tu cuerpo quiere flotar y tu mente ya ha volado.
Puedes esperar la llamada, pero será tarde.
El trampolín que necesitas está dentro de tu cabeza.
¿El primer paso?
La tarta hundida.
La reina ciega,
Su bastón doblado.
La niña despierta.
El cielo callado.
La espuma espesa.
Si no lo miras, no lo ves.
Viernes por la noche.
Puedes ser el tres
Pero antes debes ser el dos.
Dime que no lo ves.
Huellas que buscan su sombra y pasos que no avanzan.
El real sonido del huracán estalla con un silencio atronador.
Y tus pies uno junto al otro, ¿y el primer paso?
Piensas en lo que debiste hacer y no hiciste entonces,
Pero no sientas tristeza, deberías estar orgullosa.
No sabes las cosas maravillosas que te esperan.
¿El primer paso?
La moneda de la suerte.
El corazón del guerrero.
Hombres honestos
Y maletas abiertas.
Primero te tumbas
Y te dejas caer después.
Si no lo miras, no lo ves.
Debes escoger,
El sol brilla en la noche
Pero más en el día.
Dime que no lo ves.
Líneas hacia el sur
Vuelven a subir otra vez.
Nubes azuladas.
Viejos días gloriosos.
Trenes apilados.
El chico solitario.
Si no lo miras, no lo ves.
Si no te importa
No puedes creerlo.
Es el momento.
Ahora ya lo ves.
El viento en la cara.
Olor a salitre.
Vienes de lejos.
Y yo también vengo.
Abre la puerta.
El sol quiere entrar.
Es de noche.
Ahora lo miras y lo ves.
Dame tu espalda.
Duerme a mi lado.
Ahora y siempre.
Dime que ya lo ves.
Como la línea continua de la autopista del desierto.
Y tus pies aún uno junto al otro, ¿y el primer paso?
Las estrellas brillan como diamantes deportados.
No hay razón para olvidar, dices, es fuego encendido.
Tu pueblo cerrado no te recordará.
Y una lágrima cae de tu mejilla junto a tus pies.
¿El primer paso?
El coche amartillado
Y la carta cerrada.
El reflejo de la luna
Sobre la casa olvidada.
El corazón del médico.
La lluvia sobre tu cara.
Si no lo miras, no lo ves.
Amanecer en verano.
La llama del genio.
Girasoles tostados.
Dime que no lo ves.
Mamá te dijo que no debes correr sino caminar.
La escuchaste bien y luego ella dejó este mundo.
Y tus pies uno junto al otro, ¿y el primer paso?
Luego te engañaron y volviste a caer en el abismo.
Tu cuerpo quiere flotar y tu mente ya ha volado.
Puedes esperar la llamada, pero será tarde.
El trampolín que necesitas está dentro de tu cabeza.
¿El primer paso?
La tarta hundida.
La reina ciega,
Su bastón doblado.
La niña despierta.
El cielo callado.
La espuma espesa.
Si no lo miras, no lo ves.
Viernes por la noche.
Puedes ser el tres
Pero antes debes ser el dos.
Dime que no lo ves.
Huellas que buscan su sombra y pasos que no avanzan.
El real sonido del huracán estalla con un silencio atronador.
Y tus pies uno junto al otro, ¿y el primer paso?
Piensas en lo que debiste hacer y no hiciste entonces,
Pero no sientas tristeza, deberías estar orgullosa.
No sabes las cosas maravillosas que te esperan.
¿El primer paso?
La moneda de la suerte.
El corazón del guerrero.
Hombres honestos
Y maletas abiertas.
Primero te tumbas
Y te dejas caer después.
Si no lo miras, no lo ves.
Debes escoger,
El sol brilla en la noche
Pero más en el día.
Dime que no lo ves.
Líneas hacia el sur
Vuelven a subir otra vez.
Nubes azuladas.
Viejos días gloriosos.
Trenes apilados.
El chico solitario.
Si no lo miras, no lo ves.
Si no te importa
No puedes creerlo.
Es el momento.
Ahora ya lo ves.
El viento en la cara.
Olor a salitre.
Vienes de lejos.
Y yo también vengo.
Abre la puerta.
El sol quiere entrar.
Es de noche.
Ahora lo miras y lo ves.
Dame tu espalda.
Duerme a mi lado.
Ahora y siempre.
Dime que ya lo ves.
Tuesday, July 22, 2008
Lo que queda del día
Probablemente sea el peor día de mi vida,
tal vez podría haber sido el mejor.
Esperar nunca se me ha dado bien,
pero me prometí que esperaría.
Esperaré hasta que las aguas se encaucen,
hasta que el sol vuelva a salir.
Esperaré a que un día vuelva a sonar
la vieja canción de la felicidad.
Y entonces podré abrazarte,
a tí, que te he visto cada día a mi lado
aunque te encontraras muy lejos.
Es tal vez el peor día de mi vida.
Y lo es porque no sé dónde estás.
El peor día de mi vida,
porque no puedo olvidarte.
El peor día de mi vida,
porque sé que te necesito.
El peor día de mi vida,
porque te amo.
Espero saber pronto de ti,
estaré esperando en la montaña.
O tal vez en el mar.
O quizá en la iglesia.
O en el oscuro bosque.
O quizá no lo sepa ni yo.
Pero seguro que estaré esperando.
Ahora es lo único que tengo que hacer.
Ahora es lo único que tengo que hacer.
tal vez podría haber sido el mejor.
Esperar nunca se me ha dado bien,
pero me prometí que esperaría.
Esperaré hasta que las aguas se encaucen,
hasta que el sol vuelva a salir.
Esperaré a que un día vuelva a sonar
la vieja canción de la felicidad.
Y entonces podré abrazarte,
a tí, que te he visto cada día a mi lado
aunque te encontraras muy lejos.
Es tal vez el peor día de mi vida.
Y lo es porque no sé dónde estás.
El peor día de mi vida,
porque no puedo olvidarte.
El peor día de mi vida,
porque sé que te necesito.
El peor día de mi vida,
porque te amo.
Espero saber pronto de ti,
estaré esperando en la montaña.
O tal vez en el mar.
O quizá en la iglesia.
O en el oscuro bosque.
O quizá no lo sepa ni yo.
Pero seguro que estaré esperando.
Ahora es lo único que tengo que hacer.
Ahora es lo único que tengo que hacer.
Monday, April 28, 2008
El último atardecer en la vieja ciudad de piedra
Los rayos del sol volvieron a llorar aquel atardecer.
Y todas las calles ocultaron sus sombras, preocupadas.
Y todas aquellas mañanas que me decías "te quiero",
quedaron olvidadas.
Aquel atardecer amaneció en mi cielo
la llamada despierta de la realidad.
Aquel atardecer, todo pareció cambiar.
Y todas las calles ocultaron sus sombras, preocupadas.
Y todas aquellas mañanas que me decías "te quiero",
quedaron olvidadas.
Aquel atardecer amaneció en mi cielo
la llamada despierta de la realidad.
Aquel atardecer, todo pareció cambiar.
Tuesday, March 18, 2008
¿Puedes sentir mi amor?
"Cuando seas joven, yo seré mío."
En el tiempo que nos dijimos
todas aquellas palabras heridas
en la calle no paraba de llover.
¿Puedes sentir mi amor?
En la llanera desierta crujió aquel día
el viejo barco encallado,
seco y olvidado, como yo,
quedó dividido en dos partes.
¿Puedes sentir mi amor?
Veo a una preciosa mujer morena
caminando sola por la calle.
Con su mirada fija en los escaparates
se vuelve cuando la toco y le digo:
"¿Puedes sentir mi amor?"
Y en la copa de vino blanco
se suceden palabras entre las burbujas
pero no logro entender su significado,
quizá me digan que ya es mañana.
¿Puedes sentir mi amor?
Acabo esperando a que me pidan mi billete
sentado como tantos en aquel vagón.
El olor a miel seduce mis sentidos
y me cala hasta los huesos.
¿Puedes sentir mi amor?
De vuelta a la solitaria cabaña
veo que mi corto paso por aquí
no se ha notado en la ciudad
aunque un rayo me iluminara en la tormenta.
¿Puedes sentir mi amor?
"Debes seguirme la próxima vez."
Los reyes no son los únicos que esperan,
también lo hacen los ases y los treses.
Sí, hoy ha sido un gran día.
¿Puedes sentir mi amor?
Mañana volveré a los bancos de la estación
y esperaré un largo rato por tí,
me reconocerás fácilmente pese a no conocerme,
porque yo nunca te he visto pero te conozco perfectamente.
¿Puedes sentir mi amor?
En el tiempo que nos dijimos
todas aquellas palabras heridas
en la calle no paraba de llover.
¿Puedes sentir mi amor?
En la llanera desierta crujió aquel día
el viejo barco encallado,
seco y olvidado, como yo,
quedó dividido en dos partes.
¿Puedes sentir mi amor?
Veo a una preciosa mujer morena
caminando sola por la calle.
Con su mirada fija en los escaparates
se vuelve cuando la toco y le digo:
"¿Puedes sentir mi amor?"
Y en la copa de vino blanco
se suceden palabras entre las burbujas
pero no logro entender su significado,
quizá me digan que ya es mañana.
¿Puedes sentir mi amor?
Acabo esperando a que me pidan mi billete
sentado como tantos en aquel vagón.
El olor a miel seduce mis sentidos
y me cala hasta los huesos.
¿Puedes sentir mi amor?
De vuelta a la solitaria cabaña
veo que mi corto paso por aquí
no se ha notado en la ciudad
aunque un rayo me iluminara en la tormenta.
¿Puedes sentir mi amor?
"Debes seguirme la próxima vez."
Los reyes no son los únicos que esperan,
también lo hacen los ases y los treses.
Sí, hoy ha sido un gran día.
¿Puedes sentir mi amor?
Mañana volveré a los bancos de la estación
y esperaré un largo rato por tí,
me reconocerás fácilmente pese a no conocerme,
porque yo nunca te he visto pero te conozco perfectamente.
¿Puedes sentir mi amor?
Tuesday, March 11, 2008
Seré tu chica esta noche...
Cierra los ojos y toca mi boca, no te preocupes más,
yo seré tu chica esta noche.
Sigue la línea del faro, bajo la noche estrellada,
yo seré tu chica esta noche.
Mientras te abrazo, caminas bajo la luna
con la sonrisa del niño pequeño
el día de su cumpleaños.
Cierra la puerta, por ahora no quiero oir nada más,
yo seré tu chica esta noche.
Quizá seas tú, quizá las ganas que tengo de volar,
yo seré tu chica esta noche.
Llévame a través de las estrellas con las botas de vaquero,
ahora soy yo la que ríe esta noche
como una niña con vestido nuevo.
Ahora soy yo la que sonríe,
tú serás mi chico esta noche.
Dejemos la ropa y la vergüenza
lejos de la cama.
Sigue la línea del faro, bajo la noche estrellada,
yo seré tu chica esta noche.
yo seré tu chica esta noche.
Sigue la línea del faro, bajo la noche estrellada,
yo seré tu chica esta noche.
Mientras te abrazo, caminas bajo la luna
con la sonrisa del niño pequeño
el día de su cumpleaños.
Cierra la puerta, por ahora no quiero oir nada más,
yo seré tu chica esta noche.
Quizá seas tú, quizá las ganas que tengo de volar,
yo seré tu chica esta noche.
Llévame a través de las estrellas con las botas de vaquero,
ahora soy yo la que ríe esta noche
como una niña con vestido nuevo.
Ahora soy yo la que sonríe,
tú serás mi chico esta noche.
Dejemos la ropa y la vergüenza
lejos de la cama.
Sigue la línea del faro, bajo la noche estrellada,
yo seré tu chica esta noche.
Tuesday, February 05, 2008
Y no...
Aún queda un "por fin" en la puerta del colegio
cuando ves a los niños entrar.
Y te vuelves con gesto amargado.
No me preguntes por qué te ha pasado todo,
no quiero ni siquiera saberlo.
Ahora sólo soy un chico esperando su regalo,
o quizá sólo sea un chico olvidado.
Esperaré hasta el lunes de madrugada,
o hasta que el viejo bar apague sus luces.
Total, no hay tiempo que ganar.
Y tú te despides del armario cada mañana
con gesto preocupado y lágrimas en los ojos.
Nunca supiste si fue cosa tuya o cosa mía
el que nunca haya habido un nosotros.
Así que ahora suena muy fácil en tus labios
decir que olvidar es lo más correcto para ambos.
Esas palabras suenan en el eco del silencio.
Suenan hasta que son aplacadas por un:
"Tristemente no hay nada que olvidar".
Te diré adiós cada noche cuando te vea
en las luces rojas de los coches.
Y quizá sea más correcto decir:
"Nunca te olvidaré, lo siento".
cuando ves a los niños entrar.
Y te vuelves con gesto amargado.
No me preguntes por qué te ha pasado todo,
no quiero ni siquiera saberlo.
Ahora sólo soy un chico esperando su regalo,
o quizá sólo sea un chico olvidado.
Esperaré hasta el lunes de madrugada,
o hasta que el viejo bar apague sus luces.
Total, no hay tiempo que ganar.
Y tú te despides del armario cada mañana
con gesto preocupado y lágrimas en los ojos.
Nunca supiste si fue cosa tuya o cosa mía
el que nunca haya habido un nosotros.
Así que ahora suena muy fácil en tus labios
decir que olvidar es lo más correcto para ambos.
Esas palabras suenan en el eco del silencio.
Suenan hasta que son aplacadas por un:
"Tristemente no hay nada que olvidar".
Te diré adiós cada noche cuando te vea
en las luces rojas de los coches.
Y quizá sea más correcto decir:
"Nunca te olvidaré, lo siento".
Sunday, December 24, 2006
Noches en el bar de los amantes rotos
Cantantes desayunan tostadas
en las mesas cuadradas
al fondo del bar.
Poetas componen sus letras
desnudos en alma, en la barra,
junto a vasos de cristal.
Bajo el humo del tabaco
rebosan ideas perdidas
que nunca llegarán.
Habitaciones donde duermen
llenos de sueños borrachos
economistas y políticos.
Multitud de canciones
suenan a la vez con discordia
en el tocadiscos.
Son las cuatro en la noche,
son las nueve en el bar,
todos duermen tranquilos.
Tengo frío por dentro,
me duele el corazón
muero entre vasos vacíos.
Caen persianas rotas en el sueño,
cristales se clavan en barriles,
el vino se derrama por el suelo.
Acaba de llegar el jefe,
el sueño acaba de terminar.
El bar ha abierto.
Mesas vacías, canciones paradas,
letras escondidas, amantes rotos.
No dejan de llegar sueños.
en las mesas cuadradas
al fondo del bar.
Poetas componen sus letras
desnudos en alma, en la barra,
junto a vasos de cristal.
Bajo el humo del tabaco
rebosan ideas perdidas
que nunca llegarán.
Habitaciones donde duermen
llenos de sueños borrachos
economistas y políticos.
Multitud de canciones
suenan a la vez con discordia
en el tocadiscos.
Son las cuatro en la noche,
son las nueve en el bar,
todos duermen tranquilos.
Tengo frío por dentro,
me duele el corazón
muero entre vasos vacíos.
Caen persianas rotas en el sueño,
cristales se clavan en barriles,
el vino se derrama por el suelo.
Acaba de llegar el jefe,
el sueño acaba de terminar.
El bar ha abierto.
Mesas vacías, canciones paradas,
letras escondidas, amantes rotos.
No dejan de llegar sueños.
Wednesday, November 29, 2006
Selva de los olvidados
Él quiere su arma, quiere recuperar el azul
de un día que hoy se tiñó de negro.
No ha recuperado lo que se ha ido
pero no se siente solo todavía.
Ha cambiado su vieja moneda de la suerte
por un bastón y una escopeta,
con la que intentará abatir su miedo.
Su miedo a sentirse innecesario
en una sociedad en guerra.
En guerra de palabras y sueños robados,
de dibujos borrados de la memoria,
de caminos olvidados.
Esta es la historia de un hombre
que no quiso entrar en el círculo.
No se hizo paso a través de la selva
donde se ocultan versos mutilados
de canciones sobre gente como él.
¿No puede escucharle nadie ahí dentro?
No, no hay nadie allí, está él solamente.
Pero si puedes escucharle,
mejor sal corriendo ahora.
Tus pesadillas han vuelto.
de un día que hoy se tiñó de negro.
No ha recuperado lo que se ha ido
pero no se siente solo todavía.
Ha cambiado su vieja moneda de la suerte
por un bastón y una escopeta,
con la que intentará abatir su miedo.
Su miedo a sentirse innecesario
en una sociedad en guerra.
En guerra de palabras y sueños robados,
de dibujos borrados de la memoria,
de caminos olvidados.
Esta es la historia de un hombre
que no quiso entrar en el círculo.
No se hizo paso a través de la selva
donde se ocultan versos mutilados
de canciones sobre gente como él.
¿No puede escucharle nadie ahí dentro?
No, no hay nadie allí, está él solamente.
Pero si puedes escucharle,
mejor sal corriendo ahora.
Tus pesadillas han vuelto.
Thursday, November 09, 2006
Páginas dobladas
Hay un libro que guarda sus palabras
en páginas blancas, cercanas al olvido.
Todavía recuerdo cual fue la causa
de su marcha, pero no me siento dolido.
Aquella noche, la tormenta furiosa golpeaba
con fuerza mi ventana; ya estaba dormido.
Creo que el camino ha vuelto a crecer
y se alarga lejos de mi casa.
Mañana la tormenta volverá a desaparecer,
cuando camine lejos de sus palabras,
todo comenzará otra vez.
Salgo de casa, pronto, una mañana,
me siento en calma como un niño.
El viento mece mi sonrisa en la cama
de las esperanzas y sueños en camino.
Tengo la mirada fría y clavada
en las páginas dobladas de mi nuevo libro.
Me siento dormido al anochecer
iluminado por luces de ambulancia.
Carreras de coches que no se dejan ver
recorren las calles de mi ciudad en calma.
Mañana, todo comenzará otra vez.
Es primavera, huele a hierba mojada,
los pájaros cantan un nuevo desafío.
El sol me llama, me asomo a la ventana;
en su terraza, mi vecina me lanza un guiño.
La invito esa noche a cenar en mi casa
su boca dorada sigue mi camino.
El sol rojizo ilumina mi atardecer.
Su sonrisa juguetona ha robado mi alma,
creo que he vuelto a nacer.
Deseé que esa noche nunca acabara.
Todo comenzó otra vez.
en páginas blancas, cercanas al olvido.
Todavía recuerdo cual fue la causa
de su marcha, pero no me siento dolido.
Aquella noche, la tormenta furiosa golpeaba
con fuerza mi ventana; ya estaba dormido.
Creo que el camino ha vuelto a crecer
y se alarga lejos de mi casa.
Mañana la tormenta volverá a desaparecer,
cuando camine lejos de sus palabras,
todo comenzará otra vez.
Salgo de casa, pronto, una mañana,
me siento en calma como un niño.
El viento mece mi sonrisa en la cama
de las esperanzas y sueños en camino.
Tengo la mirada fría y clavada
en las páginas dobladas de mi nuevo libro.
Me siento dormido al anochecer
iluminado por luces de ambulancia.
Carreras de coches que no se dejan ver
recorren las calles de mi ciudad en calma.
Mañana, todo comenzará otra vez.
Es primavera, huele a hierba mojada,
los pájaros cantan un nuevo desafío.
El sol me llama, me asomo a la ventana;
en su terraza, mi vecina me lanza un guiño.
La invito esa noche a cenar en mi casa
su boca dorada sigue mi camino.
El sol rojizo ilumina mi atardecer.
Su sonrisa juguetona ha robado mi alma,
creo que he vuelto a nacer.
Deseé que esa noche nunca acabara.
Todo comenzó otra vez.
Monday, October 30, 2006
Día lluvioso en el camino
Corría por las calles
con el corazón en el bolsillo.
Las chicas le miraban
y le deseaban,
pero no le querían.
"Es un buen chico,
nunca se ha negado
a recoger la mesa.",
decía su abuela.
Y rezaba cada noche
por su nieto huérfano.
Cada mañana
se vestía y se peinaba
cuidadosamente.
Cogía su viejo Ford
y se iba a trabajar
al taller de su tío.
Odiaba cada día,
pero no dejaba mostrar
su infelicidad.
Sonreía, mientras lanzaba
su moneda al aire.
Las balas se cruzaron
con su sombra
alguna vez,
pero no le apagaron.
Su abuela rezaba.
Pedro cantaba.
Se reía del pasado
pero no lo entendía.
Tenía su arma,
pero no su corazón.
Eso no lo tenía.
Sara lo guardaba
en la caja fuerte
de las dudas.
Él soñaba con besarla
y acostarse a su lado
cada noche.
La madre de Sara
decía: "Ni te acerques,
puede ser peligroso."
Sara lloraba en cada
palabra que decía.
Un día le pidió
que se fugaran de allí.
Pedro le prometió la Luna
y ella aceptó.
Se largaron de allí
con una maleta.
La calle estaba vacía
en la despedida.
Su abuela lloraba
pero no demasiado.
Le deseaba lo mejor.
La noche se convirtió
en su refugio
de almas dolidas.
Esperaron al otoño
para poder dormir
y soñar con la aventura.
Los ladrones de bancos
le tentaban, como tantas
veces antes.
Pero Pedro dijo:
"Olvidadme, por favor."
"Sara, no llores.
Todo está bien.
Te amo tanto...", decía,
y le acariciaba el pelo.
Un beso no era
sino una promesa
de fidelidad.
Las cosas no
les iban demasiado bien,
pero siempre decían:
"Ya pasará."
Sara muerde la almohada
mientras Pedro se prepara
para irse al taller.
En la esquina guarda
sus lágrimas y sus sueños.
Ella sabía que todo eso
tendría que cambiar
algún día.
El cristal de las ventanas
era demasiado grueso
para atravesarlo.
Ella tenía veintidós años
pero acababa de nacer.
Las cosas no iban bien,
pero lo tenía todo.
Eso se decía.
Pedro pensaba
en tener hijos.
Sara ya lo había pensado.
Todo aquello no eran
sino olas errantes
en el mar del destino
Pero Pedro ya había
lanzado su moneda al aire.
con el corazón en el bolsillo.
Las chicas le miraban
y le deseaban,
pero no le querían.
"Es un buen chico,
nunca se ha negado
a recoger la mesa.",
decía su abuela.
Y rezaba cada noche
por su nieto huérfano.
Cada mañana
se vestía y se peinaba
cuidadosamente.
Cogía su viejo Ford
y se iba a trabajar
al taller de su tío.
Odiaba cada día,
pero no dejaba mostrar
su infelicidad.
Sonreía, mientras lanzaba
su moneda al aire.
Las balas se cruzaron
con su sombra
alguna vez,
pero no le apagaron.
Su abuela rezaba.
Pedro cantaba.
Se reía del pasado
pero no lo entendía.
Tenía su arma,
pero no su corazón.
Eso no lo tenía.
Sara lo guardaba
en la caja fuerte
de las dudas.
Él soñaba con besarla
y acostarse a su lado
cada noche.
La madre de Sara
decía: "Ni te acerques,
puede ser peligroso."
Sara lloraba en cada
palabra que decía.
Un día le pidió
que se fugaran de allí.
Pedro le prometió la Luna
y ella aceptó.
Se largaron de allí
con una maleta.
La calle estaba vacía
en la despedida.
Su abuela lloraba
pero no demasiado.
Le deseaba lo mejor.
La noche se convirtió
en su refugio
de almas dolidas.
Esperaron al otoño
para poder dormir
y soñar con la aventura.
Los ladrones de bancos
le tentaban, como tantas
veces antes.
Pero Pedro dijo:
"Olvidadme, por favor."
"Sara, no llores.
Todo está bien.
Te amo tanto...", decía,
y le acariciaba el pelo.
Un beso no era
sino una promesa
de fidelidad.
Las cosas no
les iban demasiado bien,
pero siempre decían:
"Ya pasará."
Sara muerde la almohada
mientras Pedro se prepara
para irse al taller.
En la esquina guarda
sus lágrimas y sus sueños.
Ella sabía que todo eso
tendría que cambiar
algún día.
El cristal de las ventanas
era demasiado grueso
para atravesarlo.
Ella tenía veintidós años
pero acababa de nacer.
Las cosas no iban bien,
pero lo tenía todo.
Eso se decía.
Pedro pensaba
en tener hijos.
Sara ya lo había pensado.
Todo aquello no eran
sino olas errantes
en el mar del destino
Pero Pedro ya había
lanzado su moneda al aire.
Saturday, October 14, 2006
La noche despierta
Se hace de noche en la ciudad
y el cielo se viste de negro carbón.
Las nubes de humo se acuestan despacio
y se cubren con papeles y cartón.
Lloran las farolas, solas en la calle
y los portales se ponen en guerra.
El color del pasado ciega algún sueño
que viajaba triste por la acera.
Caen las hojas del viejo y alegre árbol,
que mañana no se podrá despertar.
Las flores del parque recuerdan historias
y le acompañan en su funeral.
El viento arrastra millones de cuentos
que la gente desea escuchar.
Los bancos del parque esperan despiertos
y charlan tranquilos del amor y la paz.
Ahora suena una música alegre
con la llegada de los rayos del sol.
La gente se asoma a sus ventanas,
por fin, el mañana llegó.
y el cielo se viste de negro carbón.
Las nubes de humo se acuestan despacio
y se cubren con papeles y cartón.
Lloran las farolas, solas en la calle
y los portales se ponen en guerra.
El color del pasado ciega algún sueño
que viajaba triste por la acera.
Caen las hojas del viejo y alegre árbol,
que mañana no se podrá despertar.
Las flores del parque recuerdan historias
y le acompañan en su funeral.
El viento arrastra millones de cuentos
que la gente desea escuchar.
Los bancos del parque esperan despiertos
y charlan tranquilos del amor y la paz.
Ahora suena una música alegre
con la llegada de los rayos del sol.
La gente se asoma a sus ventanas,
por fin, el mañana llegó.
Thursday, October 05, 2006
Olas distintas, horas diferentes
Quedan canciones por escribir
que no han soñado bajo la Luna.
Suenan campanas, lejos de aquí
pero no aparece luz alguna.
Son las nueve en mi ciudad
pero no más de las ocho en la tuya,
se han ido mis lágrimas ya
bajo las olas, con su espuma.
Pero me duermo cada noche,
soñando que estoy contigo.
Me imagino que soy tu hombre
y que sigues mi camino.
Y cuando llega el nuevo Sol,
resucito de las arenas.
No recuerdo tú canción
pero en mi cabeza suena.
Tengo los zapatos en la mano
y el sombrero en la cabeza.
No puedo seguir caminando
si no me sigues de cerca.
Vuelven mis lágrimas, vuelven las olas
y quedan canciones por escribir.
No me preguntes la hora
pues te podría mentir.
que no han soñado bajo la Luna.
Suenan campanas, lejos de aquí
pero no aparece luz alguna.
Son las nueve en mi ciudad
pero no más de las ocho en la tuya,
se han ido mis lágrimas ya
bajo las olas, con su espuma.
Pero me duermo cada noche,
soñando que estoy contigo.
Me imagino que soy tu hombre
y que sigues mi camino.
Y cuando llega el nuevo Sol,
resucito de las arenas.
No recuerdo tú canción
pero en mi cabeza suena.
Tengo los zapatos en la mano
y el sombrero en la cabeza.
No puedo seguir caminando
si no me sigues de cerca.
Vuelven mis lágrimas, vuelven las olas
y quedan canciones por escribir.
No me preguntes la hora
pues te podría mentir.